Historia del Flatiron Building
Viene de https://onlybook.es/blog/el-edificio-flatiron-de-nueva-york/
Justo enfrente del edificio está el Madison Square Park.
El Flatiron Building lo construyó en 1902 el arquitecto Daniel Burnham (Henderson, EE. UU. 1846 – 1912 Heidelberg, Imperio alemán), fue diseñado como un palazzo neorrenacentista vertical, es famoso por su diseño arquitectónico único y su estilo Beaux-Arts, su fachada está cubierta de terracota blanca y cuenta con detalles ornamentales en hierro forjado.
El Edificio Flatiron es uno de los primeros edificios de oficinas construidos en Nueva York. A principios del siglo XX las oficinas en general eran oscuras y abarrotadas, su diseño se creó para abordar esos problemas.
Las oficinas en el Flatiron eran amplias y luminosas, gracias a los grandes ventanales que se encuentran en cada uno de los pisos. Además, el diseño triangular del edificio permitía que la luz natural llegara a cada rincón del edificio, algo que era especialmente importante en una época en la que no estaba popularizado el uso de la luz eléctrica.
La ubicación en la esquina de la Quinta Avenida y Broadway era ideal, al permitir a los residentes de la ciudad ver el edificio desde lejos.
El Edificio Flatiron no fue el primer rascacielos de Nueva York (existen varios criterios para definir que es realmente un rascacielos), pero sí fue el primero que se construyó en el siglo XX.
El Flatiron en un principio no gustó nada
Una de las esquinas más fotografiada de Nueva York fue vista en su momento como un edificio de mal gusto.
Hubo críticas duras y malintencionadas de la prensa, y otras como la de uno de los padres de la ciencia-ficción (junto a Julio Verne y Hugo Gernsback), el escritor y novelista británico Herbert George Wells (Bromley 1866 – 1946 Londres), autor de El hombre invisible y La Guerra de los Mundos), que escribió en su libro The Future in America: A Search After Realities (1906): “Me encontré boquiabierto, admirando un rascacielos, la proa del Edificio Flatiron en concreto, surcando el tráfico de Broadway y la Quinta Avenida a la luz de la tarde”. A pesar de tener una influencia clásica en su arquitectura, el edificio llegó a ser admirado por un auténtico futurista.
El Edificio Flatiron en la actualidad
A lo largo de los años, el Flatiron Building ha sido objeto de muchas renovaciones y restauraciones. En la década de 1960, se propuso demoler el edificio para construir uno nuevo en su lugar. Sin embargo, debido a la presión de varios sectores profesionales y de los ciudadanos, se decidió conservar el edificio, para finalmente protegerlo en 1979, al declarar al edificio Monumento Histórico Nacional.
En 2019 el edificio se quedó sin inquilinos. Sus oficinas estaban ocupadas por la Macmillan Publishers (Editorial Macmillan) y desde ese año se ha estado renovando para alojar a las nuevas empresas que querían poner alli sus oficinas.
Hoy en día, el Flatiron Building sigue siendo uno de los edificios más icónicos de Nueva York. A pesar de que ha sido superado en altura por muchos otros rascacielos de la ciudad, su forma triangular y su diseño arquitectónico único lo hacen destacar en el damero de Manhattan.
-El Flatiron Building fue uno de los primeros edificios de Nueva York en contar con un sistema de iluminación eléctrica en su fachada, lo que lo hacía visible desde muchos puntos de la ciudad durante la noche.
-En la década de 1920, se instaló una plataforma de observación en la cima del edificio, que se convirtió en una atracción turística popular durante muchos años. Hoy en día ya no está operativa,
-En 1974, un avión pequeño chocó con el edificio, causando daños menores y una gran conmoción en la ciudad.
-El Flatiron Building ha sido incluido en muchas listas de los edificios más bellos e icónicos del mundo, y sigue siendo un símbolo de la ciudad de Nueva York durante más de un siglo.
-Dicen que uno de los inconvenientes de trabajar en el Flatiron era la gran corriente de aire que se generaba al abrir las ventanas.
Exposición de Hopper en el Museo Withney
Estuvo abierta al público desde el 23 de mayo al 6 de octubre de 2013
«Hopper Drawing» es la primera gran exposición de un museo que se centra en los dibujos y el proceso creativo de Edward Hopper. Más que cualquier otra cosa, los dibujos de Hopper revelan la relación en continua evolución entre la observación y la invención en la obra del artista, y su interés permanente en los espacios y motivos -la calle, el cine, la oficina, el dormitorio, la carretera- a los que volvería a lo largo de su carrera como artista. La exposición ha presentado una investigación de archivo pionera sobre los edificios, espacios y entornos urbanos que inspiraron su trabajo.
«Hopper Drawing» fue organizada por Carter E. Foster, Steven y Ann Ames, curadores de dibujo, asi como La Fundación Horace W. Goldsmith, el Fondo Nacional para las Artes, la Fundación Dietrich, la Fundación Selz, Barney A. Ebsworth, Steve Martin y Anne Stringfield, la Fundación Robert Lehman, Jane Carroll, Aaron I. Fleischman y Lin Lougheed, Arlene y Robert Kogod, y un donante anónimo.
New York Flatiron en cine y televisión
Este icono de Nueva York se lo ve en películas.
-1998 en Godzilla, donde es destruido accidentalmente por el ejército de los EE. UU.
-Telón de fondo en los cambios de escena en “Friends”.
-2002, 2004 y 2007 de Spider-Man. Fue el periódico Daily Bugle en la trilogía.
-2007. Soy leyenda, nos lleva a un futuro bastante negro para la humanidad, se ven lugares de Nueva York destruidos o totalmente abandonados como el Puente de Brooklyn, Washington Square, Times Square o el edificio Flatiron.
-El edificio ha sido utilizado como lugar de rodaje para la serie de televisión Mad Men y la película Men in Black 3.
-El edificio ha sido objeto de muchas obras de arte y fotografías a lo largo de los años, de entre ellas la famosa fotografía tomada por Alfred Stieglitz en 1903 titulada ·The Flatiron Building·.
Alfred Stieglitz
En un artículo de 1946, Stieglitz recordaba haber fotografiado el recién construido Flatiron Building el día de una gran tormenta de nieve. “De repente vi el Flatiron Building como nunca lo había visto antes. Desde donde estaba, parecía como si se estuviera moviendo hacia mí como la proa de un gigantesco barco de vapor, una imagen de la nueva América que se estaba formando”.
La colección de Alfred Stieglitz en el Art Institute, en el sitio web: La Colección Alfred Stieglitz .
Nueva York, Whitney Museum of American Art, “Photography Rediscovered: American Photographs from 1900-1930”. Desde el 19 de septiembre al 25 de noviembre de 1979; Viaje al Art Institute of Chicago, desde el 22 de diciembre de 197 9 al 4 de febrero de 1980.
Alfred Stieglitz
Alfred Stieglitz, (Hoboken 1864 – 1946 Lake George, NY) fue un fotógrafo pionero, defendió vigorosamente la fotografía como una obra de arte y estableció su valor como arte moderno en Estados Unidos a través de su propio trabajo, las revistas que publicó y las exposiciones que realizó en influyentes galerías de Nueva York.
Fue miembro del jurado de la primera exposición de fotografía en el Instituto de Arte de Chicago, celebrada en 1900. Después de estudiar fotografía en Europa en la década de 1890, Stieglitz regresó a su casa en Nueva York y dirigió su cámara a las calles y edificios de una ciudad que cambiaba rápidamente.
“La fotografía es mi pasión, la búsqueda de la verdad, mi obsesión”. Alfred Stieglitz
Imprimió estas imágenes inicialmente como fotograbados para enfatizar los efectos atmosféricos; más tarde, publicó en la revista de bellas artes Camera Work. Durante esta primera parte de su carrera, Stieglitz también favoreció la impresión al carbono, que producía tonos profundos y una calidad suave, similar a la del dibujo.
A partir de 1910, adoptó imágenes más directas alejándose de un enfoque pictórico e impresionista. Hizo uso de papeles fotográficos como el platino, el paladio y, más tarde, las impresiones de gelatina de plata.
En sus retratos de otros artistas buscó representar su psicología y no sólo su semejanza. Este enfoque es especialmente evidente en los cientos de tomas que hizo de su esposa, Georgia O’Keeffe, (Sun Prairie, Wisconsin 1887 – 1986 Santa Fe, Nuevo México) que Stieglitz llamó un solo «retrato compuesto».
Ver https://onlybook.es/blog/georgia-okeeffe-1era-parte/
A partir de 1922, Stieglitz también realizó fotografías casi abstractas con estudios de nubes a los que llamó Equivalentes. Los veía como música en imágenes, afirmando que el arte visual podía ser tan emocional y no representativo como la música. Su obra posterior también contenía múltiples significados, ya fuera una fotografía de álamos moribundos en la finca de su familia en el lago George que funcionaba como una meditación sobre la mortalidad humana o de los rascacielos de la ciudad de Nueva York que encarnaban el progreso y la modernidad.
La formidable actividad de Stieglitz como editor y galerista fue paralela a la de su trabajo como artista. Después de trabajar como editor de la publicación Camera Notes, publicó su propia revista, Camera Work, que pasó de ser un escaparate de la Photo-Secession a un foro para el arte moderno internacional de todos los medios. En sus galerías —las Pequeñas Galerías de la Foto-Secesión, en 1908 la galería fue rebautizada como 291 por el número de calle en la que estaba ubicada; la Galería Íntima; y An American Place, introdujo la vanguardia europea y promovió una nueva generación de pintores estadounidenses, al tiempo que abogaba por el lugar de la fotografía entre las otras bellas artes.
Fue una de las primeras galerías controladas por fotógrafos, hito que Stieglitz complementó al exponer no sólo sus fotos y las de sus cercanos colaboradores, como Steichen, Gertrude Käsebier y Clarence H. White, sino que utilizó los espacios para exhibir el arte moderno europeo.
A través de 291, se dieron a conocer entre el público norteamericano las obras de Picasso, Matisse, Cézanne y Marcel Dunchamp. Los trece años que duró la galería permitieron consolidar a Alfred Stieglitz como un maestro de la fotografía y un galerista visionario. Fue una de las primeras galerías en exhibir arte creado por mujeres. La primera mujer en obtener este mérito fue Georgia O’Keeffe en 1916.
Entre los sujetos de Stieglitz están los paisajes, los campos, las ciudades, los edificios, y a partir de su transición hacia la fotografía directa, el desnudo femenino (más que nada de su amada y musa Georgia O’Keeffe) y, asimismo, el cielo y sus nubes. No faltaron tampoco los retratos hacia seres queridos y artistas cercanos a Stieglitz, como la fotógrafa Dorothy Norman y la pintora Rebecca Salsbury, a quien también retrató desnuda.
“The Terminal” (1904)
Capturada con una cámara que los profesionales detestaban por ser de “mala calidad”, Stieglitz la seleccionó porque su formato pequeño le permitía llevarla de una manera más cómoda y adaptable a la siempre acelerada vida callejera.
La foto puede considerarse otro híbrido temprano entre el pictorialismo y la fotografía directa. Aparte de hacer fotografía callejera en tiempos en los que ni siquiera existía el término, resultó estimulante su uso de la arena, el viento o la lluvia, como se ve aquí, para agregar un efecto de suavizado a la imagen.
“Siempre que haya luz, se puede fotografiar”. Alfred Stieglitz
“Torso de Georgia O’Keeffe” (1918-1919)
Más que una foto en concreto se trata de una serie de fotografías que compuso Stieglitz del torso desnudo de la pintora, que presentó en múltiples exhibiciones. El objetivo, lejos de ser solo una pretensión pornográfica o fetichista, era de carácter técnico-artístico.
Se trataba, una vez más, de la exploración de las formas en la composición fotográfica: el encuadre mantiene anónima a la mujer de tal manera que resulta íntimo e invita a observar las líneas que se forman sobre su cuerpo.
Los fotosecesionistas liderados por Alfred Stieglitz creían que la cámara era una herramienta tal como lo es el pincel para el pintor o la máquina de escribir para el escritor.
Cayeron en el error, eso sí, de inicialmente creer que la fotografía sería más válida como arte si se imitaba la pintura, que era lo que defendía el pictorialismo, aunque después Stieglitz se cambió de bando.
“La capacidad de hacer una fotografía verdaderamente artística no se adquiere de repente, sino que es el resultado de un instinto artístico junto con años de trabajo”.
“The Steerage” (1907)
Con “The Steerage”, conocida también como “La cubierta de un barco” o “El entrepuente”, Stieglitz quiso demostrar que capturar de una determinada forma la realidad podía tener su belleza: lo sobresaliente de esta foto es el uso innovador de las formas y líneas con las que compuso.
La obra presenta a emigrantes alemanes que fueron deportados de Estados Unidos, por lo que se ven obligados a ir a su tierra natal. La llegó a considerar su primera foto modernista y la promocionó múltiples veces en Camera Work.
La composición muestra dos espacios separados por el puente que, a su vez, debido a su tono, gana protagonismo y ayuda a transmitir el contraste entre ambos lados.
La vista inferior se diferencia de la de arriba porque las prendas blancas se unen como un patrón repetido, que no existe en el otro extremo de la imagen, que si se ve con detalle muestra que unos son clases privilegiadas y los otros, abajo, son menos afortunados. (3)
Cabe destacar que Stieglitz apenas se interesó en realizar fotografías de carácter social o de denuncia, él en esta escena sólo vio un conjunto de patrones perfectos para componer una gran foto.
“Mis fotografías son una imagen del caos del mundo y de mi relación con ese caos. Mis impresiones muestran la constante alteración del equilibrio del hombre en el mundo, y su eterna batalla por restablecerlo”.
Se sabe que Alfred Stieglitz se sentó a esperar que la escena luciera lo suficientemente interesante. Esta sería, asimismo, una de las primeras veces que mostró su cambio hacia la fotografía directa, dejando atrás el intencional grano y suave desenfoque que suele ser frecuente en el pictorialismo.
Según sus palabras, “Equivalents” era el resumen de sus cuarenta años de experiencia en la fotografía. Declaró:
“A través de las nubes quería dejar constancia de mi filosofía de la vida, mostrar que mis fotografías no se debían a un tema, ni a árboles, ni a rostros, ni a interiores, ni a privilegios especiales. Las nubes están ahí para todo el mundo, libres de impuestos hasta ahora”.
Stieglitz al final de sus dias, indicó a O’Keeffe que supervisara los legados de su obra a varios museos, incluido el Instituto de Arte, donde había estudiado en la década de 1910, su colección fue donada en 1949, y forma parte de la colección permanente de fotografía.
Historia del Tower Building. Edificio de la Torre 1888/89
El primer rascacielos de Nueva York fue el Tower Building, con una estructura de Steel Framing (acero estructural) se terminó en 1889, tenía 11 pisos, fue demolido en 1913/14, Desde 1913 ya no era rentable debido a la falta de inquilinos.
El Tower Building era un edificio en el Distrito Financiero de Manhattan. El arquitecto Bradford Gilbert (Watertown, NY 1853 – 1911 NY) presentó los planos para su construcción el 17 de abril de 1888, se completó el 27 de septiembre de 1889.
El Tower Building fue una estructura en el distrito financiero de Manhattan, en el número 50 de Broadway, en un lote que se extendía hacia el este hasta New Street. Podría decirse que fue el primer rascacielos de la ciudad de Nueva York y el primer edificio con una estructura de esqueleto de acero.
John Noble Sterns, un partidario de la Misión Cremorne, de la que Gilbert era fideicomisario, lo contrató en 1888 para diseñar un edificio de oficinas de once pisos en la ciudad de Nueva York.
Para un edificio tan alto, los métodos de construcción tradicionales requerían paredes muy gruesas que habrían ocupado el terreno que tenía solo 6,60 m de ancho. Recurriendo a su experiencia con los ferrocarriles, Gilbert pensó en poner un puente ferroviario de punta, con vigas de hierro para sostener los pisos y las paredes externas.
Esta innovación de «construcción de esqueleto» con «muros cortina con estructura de acero» le permitió construir un rascacielos sin tener paredes de carga gruesas, era además ignífugo. Columnas de hierro fundido de unos 6 m formaban aparte el esqueleto, y las paredes de cada piso estaban “colgadas” en lugar de transmitir la carga a la pared del piso inferior. Para sortear las ordenanzas locales de construcción, Gilbert construyó una base de cuatro pisos 21 m de alto, esencialmente la altura de los edificios adyacentes, de hierro y piedra de Little Falls, encima construyo diez pisos utilizando ladrillos de Filadelfia y Tiffany, con un techo octogonal cubierto de tejas españolas. El ladrillo era de color intenso y tenía una ornamentación celta similar a la de Mason Stables.
Al principio fue recibido con gran escepticismo, y muchos predijeron dijeron que se derrumbaría, ciertos ingenieros lo declararon «inseguro e impracticable”.
Para asegurar al público su seguridad, Gilbert trasladó sus oficinas al piso superior donde estuvo varios años. En 1889, Engineering News lo llamó «una solución muy hábil para un problema extremadamente difícil». Kobble’s New York and Environs escribió: «El edificio Tower, del 50 de Broadway, con sus quince pisos, es un ejemplo notable de una utilización inteligente de un terreno angosto».
La construcción del edificio de la Torre costó 250.000 dólares (8.477.000 dólares actuales), fue un gran negocio, ya que esperaban ingresar 210.000 dólares al año de alquileres.
Un edificio con una construcción tradicional en el mismo lote solo habría generado 30.000 dólares al año en alquiler, debido al límite de altura de diez pisos y las paredes gruesas que reducirían los metros cuadrados. Debido a que Gilbert había ideado una forma de duplicar los ingresos de la propiedad, The Philadelphia Inquirer señaló que «los viejos Knickerbockers (4) que poseen bienes raíces en Broadway y otras vías de vanguardia en la parte baja de Nueva York tienen un nuevo dios en la persona de Bradford L. Gilbert«.
El Flatiron Building New York no fue técnicamente el primer rascacielos de Nueva York, como a menudo se piensa
Este título pertenece en realidad al Tower Building, el cual se terminó en 1889 y tenía 11 pisos de altura. El Flatiron Building se construyó en el año 1902, trece años después. Sin embargo, el Tower Building fue demolido en 1913 y ya no existe.
Quizas por esta razón se dice que el rascacielos más antiguo de Nueva York (y que aún se conserva) es el edificio Flatiron.
El edificio Flatiron fue designado monumento de la ciudad de Nueva York en 1966, agregado al Registro Nacional de Lugares Históricos en 1979 y designado Monumento Histórico Nacional en 1989, lo que hizo crecer aún más su popularidad.
La historia del Flatiron Building comienza con el arquitecto Daniel Burnham, uno de los arquitectos más famosos de los EEUU, a quien se le encargó el diseño y la construcción, la realizó junto a su colaborador Frederick Dinkelberg (1858 – 1035). (5)
Su atrevido diseño provocó numerosas burlas de los periódicos de Nueva York. El New York Tribune describió su trabajo como un “miserable trozo de pastel” y “la pieza sin vida más problemática de Nueva York”.
Ver de Burnham https://onlybook.es/blog/daniel-burnham-y-el-edificio-ellicott-square-en-buffalo/
En 1959 se instaló en él la editorial St. Martin’s Press, que fue alquilando poco a poco pisos de oficinas adicionales llegando a ser desde 2004 es el único inquilino del edificio.
Bradford Lee Gilbert fue un arquitecto estadounidense, su estudio funcionó en la ciudad de Nueva York. Conocido por diseñar el Tower Building en 1889, el primer edificio con estructura de acero y el primer rascacielos en Nueva York.
Esta técnica pronto fue copiada en todos los Estados Unidos.
También diseñó la Exposición Internacional y de los Estados del Algodón de Atlanta de 1895, y muchas estaciones de ferrocarril.
Edificio inglés-americano
En 1897, Gilbert diseñó el edificio para la English-American Loan and Trust Company de Atlanta.
Ubicado al 84 de Peachtree Street NW en el centro de Atlanta, Georgia, en una manzana en forma triangular con once pisos entre Peachtree Street NE, Poplar Street NW y Broad Street NW.
De estilo neoclásico y neorrenacentista, pero de formas modernas. Fue el segundo rascacielos de Atlanta. El edificio incluía tres ascensores eléctricos, 200 habitaciones e iluminación eléctrica.
Es el rascacielos con estructura de acero más antiguo que queda en Atlanta y uno de los pocos edificios no ferroviarios de Bradfor Gilbert (contemporáneo de la escuela de Chicago de Daniel Burnham) que sobreviven hoy.
Se completó cinco años antes que el edificio Flatiron de Nueva York. El edificio Flatiron está protegido por la ciudad como un edificio histórico, figura en el Registro Nacional de Lugares Históricos.
Gilbert decidió renunciar a la universidad ansioso por aprender arquitectura,fue aprendiz a partir de 1872 y durante cinco años en el estudio de J. Cleveland Cady en la ciudad de Nueva York.
En 1876, Gilbert fue contratado como arquitecto para el Ferrocarril de Nueva York, Lago Erie y Oeste, bajo la dirección del ingeniero Octave Chanute.
En 1890, Gilbert abrió su estudio en el número 1 de Broadway, en Nueva York, decía «Ciertamente no cuesta más […] diseñar un edificio que sea arquitectónicamente correcto, de contorno bueno y tranquilo […] en lugar del trabajo elegante de ‘pan de jengibre’ que se adopta con demasiada frecuencia; y con los arreglos interiores diseñados para satisfacer todos los requisitos».
A lo largo de su carrera, Gilbert también diseñó edificios de apartamentos, iglesias, clubes, edificios de exposiciones, hospitales, hoteles, casas y edificios de oficinas.
Esta atención al detalle puede haber dado sus frutos, ya que muchos de sus otros proyectos surgieron de sus conexiones ferroviarias, incluido el diseño de residencias para los presidentes de varias empresas de los ferrocarriles como William H. Baldwin Jr., Alfred Skitt, Arthur M. Dodge, Benjamin A. Kimball, y William Greene Raoul.
Notas
3
Fotonista. Por ANA. 9 de abril de 2024. Alfred Stieglitz, el fotógrafo y galerista que cambió todo.
4
El Knickerbocker Club (informalmente The Knick) es un club de caballeros en la ciudad de Nueva York fundado en 1871. Considerado como el club más exclusivo de Estados Unidos y uno de los clubes de caballeros más aristocráticos del mundo.
El término «Knickerbocker», en parte debido al uso del seudónimo Diedrich Knickerbocker por parte del escritor Washington Irving, era un sinónimo de un patricio de Nueva York, comparable a un «brahmán de Boston».
5
Frederick Philip Dinkelberg fue conocido por ser colaborador de Daniel Burnham, en Cuando Harry S. Black, de la Fuller Company, encargó a Burnham el diseño de una nueva sede para la empresa en un terreno triangular en Madison Square, en Manhattan, Burnham ya tenía otros numerosos proyectos en los que estaba trabajando, y encargó a Dinkelberg el diseño de lo que entonces se denominaba «Fuller Building», pero que ganaría fama como Edificio Flatiron. No se sabe hasta qué punto fue responsable Dinkelberg de los detalles del diseño del Flatiron Building, y en su momento el diseño se atribuyó a «DH Burnham & Co.»
Otros proyectos importantes en los que trabajó incluyen el Jewelers’ Building de Chicago, y los grandes almacenes Wanamaker´s de Filadelfia y Nueva York.
Mientras estaba en Nueva York, Dinkelberg conoció a Charles Bowler Atwood (1849-1895) y, a través de éste a Daniel Burnham. Fue contratado para trabajar en la Exposición Universal Colombina, en la que Burnham fue el jefe de construcción.
Ver https://onlybook.es/blog/la-exposicion-mundial-de-chicago-de-1893-la-escuela-de-chicago/
Finalizada la feria, Burnham contrató a Dinkelberg para trabajar en su estudio, DH Burnham & Company.
Allí, diseñó el Edificio Santa Fe, conocido como Edificio Railway Exchange, un edificio de oficinas de 17 pisos (1903-1904) y que hoy forma parte del Distrito Histórico de Michigan Boulevard.
Y el Edificio Heyworth, un edificio de oficinas de 19 pisos, un hito en el Chicago de la época.
——————-
Nuestro Blog ha obtenido más de 1.300.000 lecturas.
http://onlybook.es/blog/nuestro-blog-ha-superado-el-millon-de-lecturas/
Arq. Hugo Alberto Kliczkowski Juritz
Onlybook.es/blog
Hugoklico.blogspot.com
Salvemos al Parador Ariston de su ruina
Let’s save the Parador Ariston from its ruin
http://onlybook.es/blog/el-parador-ariston-una-ruina-moderna-por-hugo-a-kliczkowski/